Cómo mejorar la libido de forma natural

Perdemos la libido a un ritmo frenético, casi tan frenético como la forma en que vivimos nuestra vida hoy en día. Pero eso no significa que no podamos hacer nada al respecto. Tienes el poder de mejorar tu libido, y es más fácil de lo que crees. No necesitas productos químicos ni milagros, sólo mucho placer y bienestar, y tu libido volverá antes de que te des cuenta. ¿Cómo? Coge papel y bolígrafo, tienes deberes:

Aumenta tu salud física

Si tu cuerpo no está en forma, tu libido tampoco lo estará. Así que vamos a ver todo lo que puede aportarte salud y bienestar para que rindas en la cama como nunca... 

 

  • Deja el tabaco

El tabaco. Lo que se dice de la droga más permitida de la historia ha cambiado tanto en las últimas décadas que su venta ha tenido que ser cada vez más ingeniosa. ¿Pero a quién queremos engañar? Fumar no mola.

A pesar de que durante un tiempo la imagen de un hombre fumando un cigarrillo era sinónimo de ser un galán guapo y machote, la realidad era (y es) que fumar tiene terribles consecuencias pulmonares y cardiovasculares. Y no hay nada más importante que una buena salud cardiovascular y unos pulmones sanos para afrontar una buena sesión de sexo desenfrenado. No vayas a limitar tu capacidad física si quieres rendir en la cama (o en el sofá, o en la cocina, o...). Dejar de fumar forma parte del proceso de aumento de la libido. 

 

  • Coma alimentos de verdad

Somos lo que comemos, y esto es algo que debes tener grabado a fuego en tu retina para la próxima vez que abras la nevera. Seguir una dieta nutritiva, priorizando las verduras, las proteínas magras y los azúcares reducidos, aumentará tus niveles de energía además de mantener a raya ciertos problemas de salud, como la mala circulación, el colesterol alto, la diabetes tipo 2 y un sinfín de problemas inflamatorios. 

¿Qué es lo mejor? Si quieres mejorar tu libido, sigue una dieta basada en alimentos protectores como las verduras, las legumbres, las hortalizas, las frutas y los frutos secos, acompañados de alimentos neutros como la carne, el pescado, el marisco y los lácteos de buena calidad, buenos sustitutos de las proteínas animales como la soja, las harinas integrales y los huevos. Por último, de vez en cuando un poco de harina refinada, azúcar, productos con aditivos o alcohol. 

Una mejor salud nutricional te dará una mejor salud física y un mejor rendimiento entre las sábanas. Merece la pena, ¿verdad? 

 

  • ¿Ejercicio físico? Por supuesto.

No necesitas convertirte en un atleta de élite, sólo necesitas acelerar un poco tu metabolismo cada día y hacer que la actividad física se convierta en un hábito y no en un castigo. Necesitas estar moderadamente en forma para aumentar tu libido. ¿Por qué? Deja que te lo contemos: 

El ejercicio físico diario hace que fluyan tus hormonas del buen humor, las mismas que segregas cuando tienes sexo, además de sentar las bases para tener un cuerpo ágil y preparado para la acción. Además, aumenta la energía durante el día, mejora el descanso nocturno y potencia la autoestima y la relación intrapersonal.

Y media hora es suficiente. Elige el ejercicio que más te guste, porque esto es una carrera de fondo, no un sprint. Cuanto más tiempo le dediques a este buen hábito, mejores resultados verás y más motivado estarás para alcanzar el siguiente nivel. A esta media hora diaria añade levantarte cada media hora de tu escritorio si trabajas en uno, ir andando a los sitios, no coger el ascensor, las tareas domésticas con música alegre... ¡Hay miles de trucos, pero sólo un cuerpo como el tuyo!

 

  • Descanso 

Y si te dijera que tu cerebro está especialmente activo por la noche... pues estaría diciendo la verdad. Nuestro cerebro aprovecha las horas nocturnas para consolidar recuerdos, procesar información, descartar datos que no considera importantes, crear conexiones y, en definitiva, lleva la voz cantante en cuanto a nuestro cuerpo para que podamos ser lo que estamos programados para ser. Y me temo que, si no descansamos bien, tenemos un problema. Mejorar la libido también implica cuidar el órgano más sexual de todos, ¡el cerebro! 

En un cerebro poco descansado encontramos trabajos que se han quedado "a medias" y el cerebro lo controla absolutamente todo. A grandes rasgos, dormir bien mejora el estado de ánimo y aumenta el rendimiento, pero esto no es más que el resultado de tener un sistema que funciona. Sin el descanso no podríamos procesar la información que recibimos a lo largo del día, ni segregar las hormonas apropiadas para las distintas partes del día (o de la noche, ya me entiendes), ni realizar las conexiones que sirven para reconocer nuestras necesidades. En otras palabras, sin descanso no somos nada. 

¿Qué hacer? Una buena higiene del sueño es fundamental. Lo ideal es que se consiga un sueño de calidad de entre 7 y 8 horas, evitando la luz azul durante al menos una hora antes de dormir y una hora después de despertarse. Si puedes mantener la misma rutina de sueño todos los días, aparte de los lapsos del fin de semana, mejor aún. Tu cuerpo y tu libido te lo agradecerán. 

  • Agua, agua y más agua

Esto es sólo un recordatorio rápido para beber más de 1,5L de agua cada día. Piensa en cómo tus fluidos salen de tu cuerpo, y si tu cuerpo está subhidratado... poco líquido fluirá. Además, mejora la textura de la piel, es vital para cada uno de tus órganos, incluido el cerebro, y es, literalmente, más del 60% de lo que eres. 

No se me ocurre una afirmación mejor que ésta: Más agua = mejor sexo. 

 

Mejore su salud mental

Hoy en día la salud mental es un tema candente, y eso es bueno. Darse cuenta de lo necesario que es tener una buena salud mental es el primer paso para eliminar el estigma, y para que las personas que realmente necesitan ayuda empiecen a pedirla para poder mejorar.

  • Meditar

El estrés es uno de los peores enemigos de tu libido. No te sorprendas, es un hecho biológico: aunque hoy en día el sexo es algo más que la procreación, hace miles de años no ibas a aumentar tu prole en un estado de peligro constante. Y el estrés, ya sea causado por el trabajo, la familia, las finanzas, las expectativas o incluso si no tiene nada que ver con nada que puedas relacionar, es esencialmente un estado de peligro constante para tu cuerpo, o al menos así se percibe. 

Para eliminar el estrés de tu vida y empezar a centrarte en lo realmente importante, meditar es un gran ejercicio. Y no hace falta que sepas cómo desprenderte de todo. Basta con empezar a respirar y centrarse en el presente, aunque sea durante unos segundos. Busca un espacio tranquilo y seguro donde puedas meditar a diario, preferiblemente por la mañana antes de empezar cualquier otra cosa. Utiliza algo de música relajante o uno de los cientos de meditaciones guiadas que puedes encontrar en Internet para ayudarte. A medida que empieces a liberarte del estrés, tu libido se verá liberada de una gran carga. 

  • La terapia siempre es una buena opción

Ya sea en terapia de pareja o individualmente, siempre es buena idea acudir a un especialista para hablar, resolver problemas, reflexionar o incluso admitir tus miedos. 

Tener un bajo deseo sexual puede ser causado por una gran cantidad de factores que puedes, o no, haber considerado; y un especialista te ayudará a descubrir y resolver estos problemas para que puedas tener la vida sexual saludable y satisfactoria que deseas

  • Dar prioridad a

A veces nos perdemos un poco en el ajetreo de la vida. Toda esta inmediatez y sobreexposición pública nos ha puesto patas arriba como sociedad. Hoy en día nos atamos de pies y manos queriendo hacer más y más, probándonos constantemente y olvidándonos de lo que realmente es importante: ¿Lo que hago me hace feliz?

Establecer prioridades es un excelente ejercicio de reflexión que te animo a realizar varias veces al año, siempre que sientas que estás perdiendo el norte. Es probable que esa baja de la libido no sea más que agotamiento físico y mental, falta de tiempo, estrés y situaciones poco propicias para desarrollarse como persona sana. Es muy posible que sea mejor ir a casa después del trabajo, relajarse y leer un buen libro que salir de copas con los colegas. Además, todo ese tiempo que dedicas a mantenerte en pie durante horas y horas en el gimnasio podría estar mejor invertido en tu relación. 

Haz una lista de las cosas que quieres y las que haces. ¿Coinciden? Si no lo hacen, revisa y prioriza.

 

Redescubra su sexualidad 

No todo está conquistado, de hecho todavía hay mucho que explorar. La sexualidad humana existe como un continuo, y si te has quedado atascado en un punto donde el deseo no fluye como debería... ¡hay solución!

  • Tiempo de calidad

Como hemos revelado hasta ahora, la libido se alimenta de innumerables factores, uno de los cuales son las emociones. 

Si tienes una relación, no necesitas que te recuerden que tienes que cuidarla constantemente. Hay que cuidarla, enriquecerla, trabajar juntos para resolver los problemas y, sobre todo, celebrarla. Sembrar semillas de tiempo de calidad con la pareja es de suma importancia si se quiere cosechar una libido de hierro. Aumentar los momentos de intimidad, crear nuevos vínculos afectivos, atesorar las buenas experiencias, potenciar la relación con refuerzos físicos como abrazos, besos y caricias.... Buscar momentos en los que prestar toda la atención a tu relación y todo lo que pueda contribuir a llevarla a un plano superior, potenciará a su vez tu libido.

Mantener viva la pasión en medio de la monotonía de la vida cotidiana, el estrés, la falta de tiempo y el desencanto es una tarea casi imposible. Recuerda que la falta de deseo por tu pareja no es la causa, sino la consecuencia. 

 

  • Slow Sex

Si quieres divertirte, hazlo a lo grande (pero despacio, despacio, despacio). La teoría está muy bien, pero a veces basta con redescubrirse para que la libido fluya mejor que nunca y se vuelvan a conectar esos lazos deshilachados. ¿Y si lo hacemos con Slow Sex? 

Si tienes pareja, este puede ser un excelente ejercicio de reencuentro para ambos. Sólo te pedimos una cosa: que vayas con la mente abierta. Sin ideas preconcebidas sobre lo que es el sexo y lo que sueles hacer. Esta vez, intenta experimentar de nuevo, como si estuvieras descubriendo tu cuerpo y el de tu pareja por primera vez.

A veces lo probado, o la presión del "deber ser" para ciertas cosas, puede dar un golpe a nuestro impulso sexual porque no estamos haciendo caso a nuestros verdaderos deseos. Olvídate de eso, a partir de ahora vamos a escuchar lo que realmente dicen nuestros deseos y actuar en consecuencia. ¿Te parece bien?

Asistencia natural

La historia está plagada de conocimientos atesorados por nuestros antepasados para complementar la alimentación y potenciar el rendimiento mental y físico. También existen estimulantes de la libido naturales y sin sustancias químicas, que se enumeran a continuación.

  • Maca

La maca es un superalimento que hace muchas cosas, entre ellas mejorar el deseo sexual. Es rica en minerales: cobre, hierro, calcio, zinc; y en vitaminas B. Es buena para combatir los signos de estrés, prepararse para los grandes momentos y aumentar el deseo sexual.

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  • Tribulus

Esta planta, con sus flores amarillas y sus frutos puntiagudos, se utiliza para potenciar la función hepática, aumentar el apetito, reducir el dolor y mejorar el rendimiento sexual. También fomenta la sensación de bienestar y la forma física.

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  • Ginkgo

Recomendado para aquellas personas cuya circulación necesita ser estimulada, ya que aumenta el flujo sanguíneo en todo el cuerpo, incluido el pene, lo que se traduce en una notable mejora de la capacidad de conseguir y mantener una erección.

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  • Ginseng

Mejora su respuesta al estrés, retrasa el agotamiento físico y mental, da un impulso a su sistema inmunológico, aumenta el apetito sexual y mejora las erecciones. 

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Mejorar su libido es sólo una cuestión de conocimiento y honestidad. ¿Hay algo en tus hábitos que te frena? ¿Ve el sexo o la masturbación como una obligación? ¿Estás cuidando realmente tu bienestar y tu placer? Date un respiro y resetea tu cuerpo y tu mente. Tu deseo sexual volverá a surgir. 

 

Y tú, ¿qué haces para mejorar tu libido?

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