La intimidad es un pilar fundamental en las relaciones sanas. Con ella, las relaciones se fortalecen hasta un punto en el que las dos personas pueden fomentar la cercanía, el afecto, la seguridad y la felicidad. 

Y aunque mucha gente cree que la intimidad es sólo es el acto físico del amor o la lujuria, la definición de intimidad va mucho más allá.

Hoy hablaremos de las distintas formas de intimidad y de cómo puedes conectar con tu pareja a un nivel más íntimo.

Si ya estás en una relación y sientes que necesitas reconectar, también hablaremos de cómo reconstruir la intimidad con tu pareja como la parte fundamental y bella que es.

Ya sabemos que la intimidad es importante en las relaciones. Pero no basta con darte 14 ideas sobre intimidad.

Por eso, junto con los consejos para aumentar la intimidad, también veremos:

• La definición de intimidad
• La diferencia entre amor e intimidad
• Los efectos de la falta de intimidad emocional en una relación
• La importancia de compartir los sentimientos en una relación
• Cómo reconstruir la intimidad
• Formas físicas y emocionales de intimidad
• Cómo reconectar sexualmente con su pareja
• Ideas de intimidad para matrimonios

Vamos a sumergirnos... 

Oxford Languages define la palabra "intimidad" como: 

"Estrecha familiaridad o amistad"

"Un ambiente acogedor y privado o relajado"

• E intimidad como eufemismo:"relación sexual"

Y la verdad es que todo lo anterior es cierto y válido cuando se trata de relaciones. 

Como ya hemos mencionado, la intimidad es un concepto fundamental cuando se trata de que dos personas se sientan cercanas, cómodas, seguras y felices. Así que la primera definición tiene mucho sentido cuando se trata de familiaridad y amistad.

En la segunda definición, la sensación de relajación nos hace saber que la intimidad no es sólo el acto físico del sexo. Es un sentimiento, una experiencia, un lugar de confianza y placer. 

Y en cuanto a la última definición, como eufemismo de "relación sexual" también es correcto. La intimidad puede experimentarse a nivel emocional y físico... siendo este último el sexo o la proximidad sexual.

*Sin embargo, es importante tener en cuenta que la intimidad no sólo son las "relaciones sexuales", y que también puede adoptar la forma de cogerse de la mano, abrazarse, besarse, acariciarse, etc.

Esencialmente, esta definición es muy completa y nos permite darnos cuenta de que la intimidad es mucho más que sexo. Que la intimidad es algo que puede ser tanto emocional como físico, y que es algo que puede transformar las relaciones y a las personas en más de un sentido.

El amor es un sentimiento intenso de afecto profundo. Es una emoción llena de pasión y compromiso. También es un lenguaje universal que (casi) todos queremos dar y recibir de una forma u otra. Tenemos la capacidad de amar a nuestros amigos, familiares, mascotas y parejas. 

La intimidad, en cambio, es una conexión física y emocional que uno tiene con su pareja. Es un estado del ser. Revelarse a uno mismo y compartir sueños, creencias y experiencias emocionalmente significativas suele considerarse sinónimo de intimidad a nivel emocional. No es algo que pueda forzarse, sino algo que sucede de forma natural. 

En el plano físico, la intimidad es la proximidad sensual o el contacto físico. De este modo, el simple contacto visual o estar en el espacio del otro puede ser una forma de intimidad física. 

Además, actos físicos como abrazos, mimos, besos u otras experiencias sexuales también entran dentro de la intimidad física.

La diferencia aquí es que las parejas pueden amarse, sí, pero pueden o no sentirse física o emocionalmente conectadas a su pareja (de forma íntima).

Sentir intimidad emocional en una relación puede trascender quién eres como persona y cómo te sientes, además de aumentar la conexión que tienes con tu pareja. 

Con la intimidad llega una profunda sensación de seguridad y la libertad de ser uno mismo sin tener que sentir que existe el riesgo de que la relación se acabe o se rompa.

Sin embargo, cuando hay una falta de intimidad emocional en una relación, los efectos pueden ser perjudiciales para la pareja.

La falta de intimidad emocional puede hacer que uno o ambos miembros de la pareja se sientan:

• Como si hubieran sido emocionalmente abandonados y rechazados.
• Una disminución del interés por la intimidad sexual, que podría conducir a la DSI, "deseo sexual inhibido"
• Como si no pudieran confiar, hablar o conectar con su pareja.
• Falta de autoestima, seguridad emocional y protección. 
• Aislamiento, ira, desconexión, ansiedad, estrés, depresión, frustración, resentimiento y sentimiento de insuficiencia.
• Deseo de infidelidad.

Hemos mencionado que la intimidad puede ser emocional y física, así que quizá sea un buen momento para pensar si te falta intimidad emocional o física, o ambas. 

De este modo, podrás dar activamente estos pasos para reconstruir la intimidad con tu pareja.

Cuando emprendes el viaje para reconstruir la intimidad emocional, lo más importante es aumentar la cantidad de tiempo que pasas con tu pareja. De este modo, estarás trabajando para recuperar esa sensación de "nosotros". 

Hay que tener en cuenta que las relaciones es que son únicas. No hay dos parejas iguales, y la cantidad de tiempo que una pareja pasa junta puede funcionar para ellos, pero puede no funcionar para ti. 

La forma de descifrar si hay falta de intimidad emocional es cuando se siente la pérdida de la cercanía que antes se tenía, y tal vez haya una sensación de no ser amado.

Por supuesto, hay razones por las que algunas parejas no pasan mucho tiempo juntas. Tal vez tiendan a entrar en conflicto cuando lo hacen, lo que podría llevar a uno o ambos miembros de la pareja a evitar activamente pasar tiempo juntos. Pero la única manera de superarlo es resolver el conflicto y restablecer el deseo de pasar tiempo juntos.

Otros pueden argumentar que su vida es demasiado ajetreada y que no tienen mucho tiempo para dedicar a su pareja. Puede que crean que estar juntos en la misma habitación mientras hablan por teléfono o ven la televisión equivale a pasar tiempo juntos. Pero, en el fondo, lo importante es la forma de pasar tiempo juntos. 

Esto no significa que tengáis que tener una cita todas las semanas o iros de vacaciones juntos. Simplemente significa que hay que reservar tiempo para estar activamente con el otro, para entablar conversaciones significativas. 

En este ámbito, la calidad prima sobre la cantidad (lo que no quiere decir que la cantidad no sea importante). Pasar una hora conectando de verdad con tu pareja y comunicándote supera a ver cinco horas de tu programa favorito juntos, por ejemplo.

Sin embargo, pasar más tiempo juntos puede ayudarles a establecer esa sensación de cercanía y conexión. Se necesita tiempo y energía para reconstruir la sensación de intimidad.

En el ámbito de la reconstrucción de la intimidad física, es cierto que muchas parejas tienen libidos desajustadas.

Uno de los miembros de la pareja puede tener un deseo sexual mayor que el otro, lo que puede llevarle a sentirse cohibido, no deseado y puede llegar a culpar a su pareja. Pero recuerda: la intimidad física no solo abarca el sexo. 

La intimidad física también se refiere a estar cerca el uno del otro, físicamente. Sentarse juntos íntimamente, abrazarse, besarse, juegos preliminares, mimos, cogerse de la mano y sexo... todo ello forma parte de la intimidad física.

Si hay una falta de intimidad física en tu relación, lo más importante es no culparse mutuamente. Esto sólo empeorará las cosas. 

Además, fingir que el problema no existe también puede ser perjudicial para la relación. Reconocer y expresar sus sentimientos es la forma más constructiva de empezar a reconstruir vuestra intimidad física.

Comunica que puedes sentirte rechazado, no querido, presionado, infeliz, falto de cariño o cohibido. Es preferible utilizar el "yo" para no culpar a la pareja. Puede ser difícil no criticar, pero la forma más eficaz es asumir un sentimiento en lugar de culpar.

Durante la conversación, intenta ser sensible y reflexivo. Si no estás seguro de lo que dice tu interlocutor, pídele aclaraciones, dale tiempo y espacio para que comparta contigo su propia experiencia y su verdad de forma respetuosa. 

Si hay respeto y comprensión mutuos, se pueden conseguir muchas cosas. Cuando hay culpa, falta de respeto o evitación activa cuando se habla sobre el tema de la intimidad física, puede crearse un obstáculo enorme para reconstruir la intimidad física.

Por otra lado, cabe señalar que el cerebro está considerado como el mayor órgano sexual. Cuando hay problemas dentro o fuera de una relación, estrés, depresión, miedo o ansiedad, es difícil que una persona "se anime". ¿Cuál es la mejor manera de hacerlo para recuperar la intimidad? Crear un espacio seguro para esa persona que la haga sentirse relajada.

Podrías realizaros ligeras caricias o incluso daros un masaje relajante e intentar aliviar cualquier tensión. Este tipo de caricias no sexuales son especialmente importantes para las mujeres, ya que a menudo necesitan estimulación emocional y física antes del sexo con penetración. 

Lo que también resulta útil para quienes desean reconstruir su intimidad física es simplemente estar el uno con el otro sin ninguna expectativa de sexo o actividad sexual. Los abrazos largos y los mimos, por ejemplo, pueden ayudar a restablecer la intimidad. Además, liberan la sustancia química oxitocina en el cerebro, que fomenta la cercanía y la confianza.

En última instancia, sin embargo, eres tú quien debe averiguar por qué hay una falta de intimidad física y trabajar en reconstruirla a partir de ahí. 

Ten en cuenta que la falta de intimidad física también puede deberse a problemas médicos, como la disfunción eréctil o la sequedad vaginal. Esto puede hacer que uno de los miembros de la pareja rehúya cualquier contacto físico por miedo o incomodidad. 

Al fin y al cabo, se trata únicamente de una comunicación eficaz para descubrir la raíz y trabajar en la reconstrucción de la intimidad.

Y, ahora que hemos descubierto cómo reconstruir la intimidad con la pareja, aquí tienes más consejos prácticos para que experimentes en pareja... 

Para mejorar la intimidad emocional con tu pareja, hay algunas cosas increíblemente creativas y divertidas que puedes probar. 

1. Dile a tu pareja algo que aprecies de ella: es algo tan sencillo pero tan significativo... También es una forma de mejorar la comunicación. Una vez al día, intenta decirle a tu pareja algo que aprecies de ella. Puede ser algo como "Esta mañana has hecho un desayuno excelente, ¡gracias!" o "Hoy estás guapísimo". Intenta que sea algo único para ellos, que les haga sentirse realmente bien consigo mismos.

2. Reserva tiempo para estar a solas sin interrupciones: Casi todo el mundo tiene una vida caótica, pero cuando reservas tiempo para estar con tu pareja, estás dedicando intencionadamente la energía necesaria para intimar más. Durante este tiempo, intenta evitar las distracciones y simplemente entabla una conversación sobre tus pensamientos, sentimientos y opiniones. Al mismo tiempo, deja espacio para que tu pareja haga lo mismo mientras escuchas. Otra posibilidad es dedicar el tiempo a una afición común, crear algo juntos o probar algo nuevo por primera vez.

3. Dejar muestras de afecto: al igual que decirle a tu pareja algo que aprecias de ella, dejar muestras de afecto es una forma creativa y divertida de demostrar que te importa. Por ejemplo, puedes dejarle una nota adhesiva en la nevera o en su cuaderno.

4. Nuevas maneras de estar disponible: intenta encontrar formas de estar ahí para tu pareja que sean diferentes. Por ejemplo, si sabes que le encanta el café de un sitio concreto, haz el esfuerzo de traérselo. O, si suele ser tu pareja quien hace una tarea, hazla tú. Estos sencillos actos de generosidad aumentan sorprendentemente la intimidad.

5. Escribe las cosas que amas/te gustan del otro: otra idea sencilla, pero estupenda para mejorar la conexión. En lugar de centrarte en los defectos de tu pareja, dedica tiempo a escribir las cosas que realmente te gustan o te encantan de ella... casi como una lista de agradecimiento. Podéis hacerlo juntos, o incluso por vuestra cuenta, pero al hacerlo, seréis capaces de reorientar la forma en la que veis y sentís a la otra persona. 

6. Invertir en el desarrollo personal: puede sonar contradictorio, pero el amor propio y el cuidado de uno mismo son extremadamente importantes. Queremos ser la mejor versión de nosotros mismos, estemos solos o en pareja. Y en una relación, invertir en tu bienestar te permitirá sentirte lo mejor posible y estar en contacto con lo que piensas y cómo piensas. Esto puede traducirse en una mayor participación y disposición a comunicarte con tu pareja de forma consciente y significativa.

7. Establecer contacto visual: muchos estudios demuestran que cuando se establece contacto visual con la pareja, se puede crear una conexión más fuerte y profunda. De hecho, el contacto visual es tan poderoso que puede fortalecer las relaciones y aumentar la intimidad en diferentes ámbitos. Esto se debe a que, cuando se establece contacto visual, se libera una hormona llamada oxitocina. La oxitocina se conoce como la "hormona del amor" y fomenta los lazos afectivos, la confianza, la empatía y los recuerdos positivos. Para practicar el contacto visual, puede sentarse frente a su pareja, programar un temporizador durante un tiempo acordado y no hacer nada más que mirarse fijamente a los ojos. Mientras estéis mirándoos, intentad sentir lo que siente vuestra pareja.

Las formas de conectar físicamente en la intimidad parecen infinitas. ¡Eso es una gran noticia! ya que te ofrece la posibilidad de encontrar algo que realmente os guste a los dos.

1. Prioriza el placer sexual: cuando conviertes tu placer sexual y el de tu pareja en una prioridad y trabajas para dejar atrás creencias o problemas interiorizados que no te sirven, te abrirás a una frecuencia diferente de felicidad. Es más difícil de lo que parece, pero tómatelo con calma. Recuerda que el placer no tiene por qué ser todo o nada, y que trabajar juntos para satisfacer vuestras necesidades es beneficioso para ambas partes. Esto no significa necesariamente alcanzar el orgasmo. Puede ser simplemente empaparse de la experiencia sexual con tu pareja de tal manera que os haga sentir a los dos libertad, placer, felicidad y comodidad.

2. Masturbación mutua: La masturbación mutua es cuando ambos miembros de la pareja se masturban al mismo tiempo, o cuando cada miembro de la pareja se masturba delante de su pareja. En este último caso, puede ser totalmente liberador y poderoso. No sólo es una forma de asegurar el placer, sino también un momento de aprendizaje para que tu pareja te vea hacer lo que realmente te excita. 

3. Sexo tántrico: el sexo tántrico trata sobre la iluminación y el trabajo para trascender tanto el plano sexual como el espiritual mediante la práctica de un sexo profundamente meditativo, espontáneo e íntimo. Se parece al yoga en que se trata de la conciencia física y espiritual, y de estar más en sintonía con el cuerpo y la pareja. Sin embargo, el sexo tántrico no tiene por qué incluir la penetración. Puede ser una experiencia de juegos preliminares intensos y conscientes. Cosas como dar y recibir sexo oral, dar y recibir masajes, o ducharse juntos, cuando se está plenamente en el presente, pueden considerarse sexo tántrico. Lo más importante del sexo tántrico es establecer una conexión, ir despacio, ser consciente y estar presente, y sumergirse por completo en el momento.

4. Paseos nocturnos juntos: la intimidad física no es sólo sexo o experiencias sexuales. Por eso, actividades como pasear juntos pueden ser totalmente satisfactorias y físicamente íntimas. Dad un paseo juntos, cogidos de la mano, y deshaceos de todo ese exceso de energía. También es una forma estupenda de conectar al aire libre y, tal vez, de mantener una conversación profunda y significativa.

5. Daos  un masaje sensual y sexualmente sugerente: los masajes sensuales son increíblemente beneficiosos, y no requieren de mucho. Basta con crear un espacio cálido y seguro que fomente la comodidad y la confianza, y coger un aceite de masaje suave y relajante. aceite de masaje. Podéis turnaros para masajearos mutuamente, como ambos prefiráis. Empezad por las zonas no erógenas, como las piernas y los brazos, e id acercándoos a los genitales y otras zonas erógenas. La clave para practicar un masaje sensual es ir despacio, comunicar lo que se siente y estar atento al otro.

6. Acepta nuevas experiencias sexuales: esta es una opción divertida, ya que puede ser cualquier cosa que te resulte intrigante. Podríais jugar a un juego sexy, como verdad o atrevimiento, o incluso comprar un juego de mesa sexual. O, por qué no, considerar la posibilidad de hablar sucio en la cama, enviar mensajes sugerentes como preliminar, utilizar un (nuevo) juguete sexual, experimentar con  unbrillo de frío y calor o lubricantes, o probar a jugar al aire libre con un vibrador portátil? La lista parece interminable.

7. Crear un mapa erótico: se trata de un mapa de la excitación que revela tu lenguaje erótico específico, ya sea sensual, sexy, pervertido, energético o versátil. Al hacer el Cuestionario del Mapa Erótico, podrás descubrir tu propio lenguaje y el de tu pareja, para que juntos podáis abrazar plenamente vuestros deseos. 

Aunque ya hemos hablado de reconectar con tu pareja a nivel emocional y físico, aquí vamos a tratar el tema del sexo. Sí, la intimidad física abarca el sexo, pero no siempre. 

El sexo y la intimidad sexual son una parte importante de una relación, y trabajar para reconectar sexualmente con tu pareja conlleva muchísimos de beneficios, tanto mentales como físicos. 

He aquí algunas formas de reconectar sexualmente con tu pareja:

• Redescubrid el cuerpo del otro: reservad tiempo suficiente sin distracciones y limitaos a jugar. Tomároslo con calma y tocaos en lugares nuevos y conocido para recordar vuestros cuerpos y lo que le resulta placentero a ambos.
• Reintroducid viejos hábitos que os fueron útiles: quizá solíais hacer todo tipo de cosas divertidas cuando os conocísteis, pero desde entonces habéis dejado de hacerlo. volved a lo básico. Haced cosas que antes os aceleraba el corazón, cosas que quizás habéis olvidado.
• El orgasmo no es el objetivo final: con el paso del tiempo, el sexo puede volverse monótono, aburrido o mundano. También puede ser algo que se haga simplemente para intentar llegar al orgasmo. Pero, ¿por qué no explorarse de verdad el uno al otro? Dedica tiempo a los preliminares y a otras cosas sexuales que pueden provocar un placer inmenso. Olvídate de una sesión de jugueteo de cinco minutos con el objetivo final del orgasmo, ¡y diviértete!
• Prueba cosas sexuales nuevas : ¡nunca se es demasiado mayor para aprender trucos nuevos! Vive como si hubiera una nueva postura sexual o un juguete sexual o accesorio sexual cada día. Empieza a investigar y encuentra nuevas formas de disfrutar el uno del otro.
• Dar prioridad al sexo: Con lo ajetreada que es la vida, dar prioridad al sexo es una forma estupenda de asegurarse de que lo practicas. Los estudios demuestran que cuanto más sexo se tiene, más sexo se desea. Así que, para mantener la excitación sexual, reserva tiempo para el sexo. Puede parecer menos espontáneo, pero en realidad podría jugar a tu favor, ya que puedes prepararte mentalmente para ello.
• Comunica tus deseos: como hemos mencionado a lo largo de este artículo, la comunicación está en la vanguardia de una relación sana. Cuando eres capaz de comunicar tus necesidades sexuales sin juzgarlas, hay espacio para explorar y crecer. Y quién sabe, ¡quizás haya algún deseo o fantasía que ambos tengáis y que desconocíais!
• Tómatelo con calma si es necesario: ir despacio puede ser muy beneficioso para estrechar lazos y generar confianza. No sólo eso, sino que muchas personas, especialmente las mujeres, necesitan tiempo para excitarse antes de practicar sexo con penetración u otras prácticas sexuales.

Cuando las personas mantienen una relación duradera o llevan algún tiempo juntos o casados, puede ser todo un reto volver a los días de luna de miel. 

Pero la verdad es que, aunque el principio de tu relación fue probablemente muy divertido, con mucha experimentación sexual, es casi imposible recuperar eso. 

La buena noticia es que el tiempo que habéis pasado juntos no ha hecho más que aumentar vuestra intimidad. Ahora os conocéis más profundamente, y esto significa que podéis tener relaciones sexuales aún más significativas. Añade una capa de conexión que es imposible para las nuevas parejas.

Así que, para aquellos que buscan cómo tener más intimidad sexual con su marido, o cómo tener más intimidad sexual con su mujer, en realidad ya están en el mejor de los inicios.

Aquí enumeramos algunas cosas que puede hacer para tener más intimidad con tu pareja cuando estéis casados. 

Sin embargo, recuerda que el trabajo en equipo hace que la relación funcione. Por tanto, la comunicación es esencial a la hora de aprovechar realmente los beneficios de las actividades íntimas.

Así que, para los casados, he aquí algunas formas de intimar más con tu pareja:

Empezar a acariciarse: puede resultar complicado cuando nos presionamos para pasar directamente de la falta de intimidad a las relaciones sexuales "convencionales". En cambio, tomar una vía más sensual puede reducir la ansiedad y llevar a experiencias sexuales más intensas. En este sentido, los mimos son un buen primer paso. Tómate tu tiempo para abrazarte durante 10 minutos antes de acostarte, por ejemplo. Lo mejor de los mimos es que pueden liberar un cóctel de hormonas del bienestar que alivian algunos sentimientos negativos o incómodos. 

Besaros: al igual que los abrazos, los besos profundos son una forma encantadora de volver poco a poco a una relación más íntima con tu cónyuge. Puede ayudaros a reconectar físicamente, y si conduce a relaciones sexuales consentidas y satisfactorias o a otra actividad sexual... también es genial. 

Sé intencionado con el tacto: haz un esfuerzo consciente por incorporar pequeños actos de tacto a tu matrimonio. Cosas como abrazos, un beso rápido en la mejilla, una palmadita en la espalda o incluso un apretón de manos ayudarán a restablecer vuestro vínculo físico y os acercarán más. 

Mimaros por turnos: las relaciones y los matrimonios son una cuestión de dar y recibir. Y adoptar esta actitud en el sexo será muy beneficioso para ambos. Dedica tiempo a hacer algo por tu marido o mujer que le guste... puede ser hacerle sexo oralbesos profundos o un masaje sensual. Despues... que te devuelva el favor. Esta es una forma excelente de resolver cualquier problema como un libido desajustada o la falta de compatibilidad sexual.  

Y por último, ¡descubramos por qué es importante compartir los sentimientos en una relación!

A menudo, el primer problema que surge con la falta de intimidad es la falta de comunicación. Esto significa que uno o ambos miembros de la pareja pueden sentirse desconectados a un nivel más profundo. 

Pueden creer que son incapaces de acudir a su pareja cuando se sienten tristes o infelices, o cuando tienen algún problema (relacionado o no con la relación). No sólo eso, sino que pueden sentir que tampoco pueden o quieren compartir sus sentimientos positivos con su pareja.

Cuando esto ocurre, se produce un distanciamiento emocional. E inevitablemente, las relaciones pasarán por periodos malos porque no se abordan ni se hablan los sentimientos, las situaciones, las experiencias y las preocupaciones.

Dicho esto, es evidente que compartir los sentimientos en una relación es fundamental. De hecho, una relación sana suele ser aquella que incluye una comunicación abierta y honesta sin ningún sentimiento de miedo, culpa o juicio.

Sin embargo, lo esencial es que cuando eres libre de compartir tus sentimientos con tu pareja, estás participando activamente en la creación de cercanía y conexión. 

Puede dar miedo, ya que implica asumir un riesgo emocional y valentía, y puede hacer que uno se sienta expuesto y vulnerable. Pero la vulnerabilidad en una relación también es importante, ya que permite ser uno mismo en lugar de intentar agradar a los demás. Fomenta una mayor intimidad y confianza en las relaciones.

Por el contrario, para sentir todos los beneficios de compartir tus sentimientos en tu relación, un estudio muestra que la expresión es sólo la mitad del proceso. La otra mitad es la receptividad de la pareja. 

En otras palabras, cuando uno expresa sus sentimientos, la pareja debe mostrar sentimientos de aprecio, afecto, comprensión y aceptación para que se produzca una experiencia íntima. 

La retroalimentación empática es la piedra angular de una comunicación eficaz, ya sea verbal o no verbal, ya que indica que existe confianza.

Esperamos que hayas aprendido un par de cosas y que puedas poner en práctica algunas de estas sugerencias en tu relación. Estamos en tu equipo y te animamos a que tengas las relaciones íntimas más satisfactorias con tu pareja o cónyuge.